Prioridades

Todos merecemos sentirnos seguros en nuestros hogares, en nuestras calles, en los pueblos pequeños y en las grandes ciudades. Como fiscal general, me comprometo a construir comunidades seguras en todo Oregon. Tengo un punto de vista único, ya que me he sentado en un tribunal en la mesa del fiscal y en la del acusado, cuando era más joven y tenía menos experiencia. Aportaré todas esas experiencias al cargo de fiscal general.

Como legislador estatal, aprobé leyes con sentido común sobre las armas para proteger a los supervivientes de la violencia doméstica, aumenté la financiación para la comprobación de antecedentes y erradiqué las armas no reguladas de nuestras calles. Continuaré esa labor como fiscal general al elaborar un plan integral para proteger a los ciudadanos de Oregon de la violencia por armas de fuego, especialmente en nuestras escuelas.

Como miembro de la Cámara de Oregon, trabajé duro para mejorar la seguridad pública. En los últimos seis años, hemos añadido más de cuarenta policías estatales para mantener seguras nuestras carreteras y comunidades, hemos añadido clases en la academia para que los agentes salgan más rápidamente a la carretera en las comunidades de todo Oregon, y hemos apoyado las inversiones del Laboratorio Estatal de Criminalística y de los Médicos Forenses para que los agentes puedan responder mejor a los delitos graves en nuestras comunidades.

Aunque el Departamento de Justicia no es el organismo encargado de hacer cumplir la ley, tiene un rol importante en hacer que los ciudadanos de Oregon y sus comunidades estén más seguros. Como su fiscal general, trabajaré para reforzar la asociación de la División de Justicia Penal del Departamento de Justicia con los fiscales de distrito y las fuerzas de seguridad. Algunos de los recursos en los que me centraré son:

• Programa de Aplicación de la Ley/Asistencia a Fiscales de Distrito, que busca proporcionar asesoramiento jurídico las 24 horas del día, e investigar y enjuiciar casos penales complejos, como homicidio, explotación infantil, conducción bajo los efectos de sustancias tóxicas (DUII), violencia doméstica y maltrato de adultos mayores.
• Grupo de Trabajo de Oregon sobre Delitos contra Menores en Internet (ICAC), que se centra en investigar, enjuiciar y prevenir la explotación sexual de menores en Internet.
• División contra la Delincuencia Organizada, que se encarga de detectar y combatir la delincuencia organizada y de investigar las acusaciones de funcionarios públicos implicados en corrupción o malversación.
• Comisión de Normas Estatales de Conducta y Disciplina de las Fuerzas de Seguridad, que trabaja para garantizar unas prácticas de aplicación de la ley justas e informadas en todo el estado.

Por último, para ayudar a reconstruir la confianza entre la policía y las familias, trabajaré con las fuerzas de seguridad para darles las herramientas que necesitan para hacer su trabajo, y con los defensores de la reforma de la justicia penal para asegurarme de que nuestro sistema judicial funciona para todos los ciudadanos de Oregon.

De niño, vi de cerca los impactos de la adicción y el abuso de sustancias, e incluso asistí a reuniones de AA con mi madre. Se trata de un tema profundamente importante y personal para mí. La adicción es una importante crisis de salud pública; ofrecer tratamiento inmediato y de forma eficaz a quienes luchan contra ella debe ser una prioridad absoluta. También está claro que la adicción forma parte de una compleja red de problemas que incluyen la falta de hogar, la salud mental y del comportamiento, y la actividad delictiva.

Como fiscal general, reuniré a los defensores de la aplicación de la ley y de la reforma de la justicia penal para encontrar enfoques probados e impulsados por soluciones para conectar mejor a las personas con los servicios, al tiempo que se aumentan los esfuerzos para perseguir el tráfico de drogas a gran escala, especialmente la epidemia de fentanilo.

Está claro que la situación de vivienda y el abuso de sustancias a menudo pueden estar unidos.

Durante la crisis de vivienda de Oregon, he trabajado para crear los mayores paquetes de vivienda de la historia del estado para sacar a las personas de la calle y darles una vivienda estable, así como aumentar la oferta de viviendas para que los hogares sean más asequibles para todos los ciudadanos de Oregon. Me he sentido frustrado por la burocracia y el tiempo que ha llevado que estas inversiones y políticas tengan un impacto en nuestras comunidades. Como fiscal general, trabajaré con las agencias estatales para agilizar estos procesos legales y conseguir que estas inversiones lleguen a las comunidades para que los servicios puedan prestarse de inmediato.

No hay nada más intensamente personal que la decisión de tener o no hijos. Esa decisión, y cualquier decisión sobre la salud reproductiva, es un derecho que debe pertenecer a la persona, no a un juez, y ciertamente no a los políticos. La decisión de la Corte Suprema de EE. UU. de anular el caso de Roe v. Wade fue un duro recordatorio de que nunca podemos dar por sentados nuestros derechos fundamentales. La extrema decisión de Dobbs hace que las mujeres y las familias de todo el país estén menos seguras, y perjudica a millones de personas, en particular a las personas de color y de bajos ingresos, lo cual agrava la desigualdad existente.

Estoy orgulloso de mi trabajo en la legislatura para garantizar que aquí, en Oregon, los derechos reproductivos y la atención médica cuenten con las protecciones más sólidas del país. Como fiscal general, defenderé enfáticamente esas protecciones y me opondré a los intentos republicanos de imponer cualquier prohibición nacional del aborto, y a los esfuerzos de algunos estados contrarios al derecho a decidir de llegar más allá de sus fronteras para restringir el acceso seguro al aborto. Me comprometo a proteger, reforzar y ampliar el acceso seguro y equitativo a la atención reproductiva y de afirmación de género, independientemente de quién sea usted, dónde viva o cuánto dinero gane.

Como abogado, he trabajado extensamente en una amplia gama de casos de protección del consumidor, y he visto cómo estas cuestiones se han vuelto mucho más urgentes, especialmente con el aumento de la desigualdad económica. Garantizar que estamos haciendo cumplir las leyes de protección del consumidor es fundamental, y como fiscal general, voy a trabajar de forma proactiva para hacer frente a los préstamos predatorios, las estafas, el robo de identidad, el fraude de crédito y las prácticas abusivas de las compañías de seguros; y ampliaré los esfuerzos del estado para que los consumidores sean tratados legalmente y de manera justa en el mercado.

Tengo previsto ampliar el trabajo del Departamento de Justicia para investigar y enjuiciar a quienes infringen la Ley de Prácticas Comerciales Ilegales en Oregon. Actualmente, el Departamento de Justicia no cuenta con el personal ni los recursos adecuados para ejecutar plenamente esta misión. Esto significa contratar a más abogados e investigadores para revisar sistemáticamente las quejas de protección del consumidor y encontrar a los malos actores. Este escrutinio permitirá que el Departamento de Justicia de Oregon construya casos impactantes contra grandes intereses, empresas y grupos que infringen la ley de Oregon, ya sea mediante estafas, telemercadeo, llamadas automáticas, compraventa ilegal de automóviles u otras prácticas predatorias. Todos los ciudadanos de Oregon deberían tener un lugar al que puedan acudir cuando un mal actor los perjudique o se aproveche de ellos.

La base fundamental del sueño americano es una proposición sencilla; si uno trabaja duro, se sacrifica y cumple las reglas, tiene la oportunidad de construir una vida mejor y ofrecerles a sus hijos un futuro mejor. Eso ya es bastante difícil si el mundo fuera un lugar justo. Por eso, es indignante cuando a las familias trabajadoras se les ponen obstáculos injustos e ilegales en su camino.

Como hijo de una madre soltera y trabajadora que dependía de que la pensión alimenticia llegara a tiempo para poder llegar a fin de mes, entiendo los retos a los que se enfrentan muchas familias trabajadoras de Oregon. Esto es importante no solo para ellas, sino también para las empresas, las escuelas y los sistemas de atención médica con los que todos contamos.

Como fiscal general, protegeré a los trabajadores del robo de salarios, la clasificación laboral errónea y las infracciones de las normas sobre el trabajo infantil; pondré fin a las prácticas nocivas, como la programación de los turnos; defenderé a los trabajadores de la destrucción de sindicatos y de las infracciones laborales; protegeré a los trabajadores de los contratos injustos de no competencia y del robo de propinas por parte de sus empleadores; y protegeré a todos del acoso sexual en su lugar de trabajo.

El fiscal general de Oregon investiga las infracciones de la legislación laboral y hace rendir cuentas a los infractores. En otros estados, los fiscales generales han reforzado significativamente ese rol por medio de la creación de dependencias laborales dentro de sus oficinas. Oregon tiene la oportunidad de aprender de los éxitos de otros estados, por lo que, como su próximo fiscal general, crearé un nuevo equipo de cumplimiento de la legislación laboral dentro del Departamento de Justicia para garantizar la protección de los derechos de todos los ciudadanos de Oregon en el lugar de trabajo.

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Oregon tiene un patrimonio natural de paisajes espectaculares, vida salvaje, y aire y agua limpios. Como ciudadano de Oregon y padre de familia, creo que es nuestra responsabilidad proteger ese patrimonio y el futuro de nuestros hijos al exigir que los contaminadores rindan cuentas y hacer frente al cambio climático en Oregon.

Continuaré y ampliaré nuestra asociación con la Coalición Nacional Ambiental de Fiscales Generales a fin de que Oregon sea un líder a la hora de abordar problemas nacionales que también nos afectan aquí en casa.

Bajo mi liderazgo, el Departamento de Justicia de Oregon trabajará para que los contaminadores rindan cuentas por los daños que causan a nuestra agua, nuestra tierra y nuestro aire. Por ejemplo, la Ley de Vías Fluviales Escénicas del Estado de Oregon, que protege nuestra agua potable, los peces salvajes y los ecosistemas fluviales, no ha experimentado una ampliación sustancial desde 1988 y no es suficiente para proteger ni siquiera un poco nuestras vías fluviales. Pienso trabajar con nuestro gobierno estatal, no solo para ampliar estas protecciones, sino para hacerlas cumplir más estrictamente.